Publicado: 23/09/2014 - Actualizado: 04/05/2017
Autor: Josep Masdeu
Nuestra naturaleza es estar sanos. Y como cualquier cosa que es natural, innata, está grabada en nuestras células como algo inconsciente. Tenemos esa información y la capacidad de sanar también aunque lo desconocemos.
La reflejoterapia, proporciona mucha ayuda, alivio y curación a muchas personas que necesitan soluciones naturales y prácticas, como esta, para tratar su salud.
La Reflejoterapia se basa en aplicar un masaje concreto en la zona adecuada del cuerpo, haciendo que la energía del cuerpo fluya siguiendo ciertos caminos, conectando cada órgano y cada glándula con su punto de presión en los pies, en las manos, o en cualquier otra parte del cuerpo. Puede pasar que los canales estén bloqueados y haya alguna sensibilidad en estos puntos, esto es señal de que las molestias pueden estar en otra parte distinta a la zona sensible. Hacer masajes sobre determinados puntos reflejos permite liberar los canales, facilitando el flujo de la energía y aliviar el dolor y reparar cualquier disfunción. En La Reflejoterapia no utiliza ninguna medicación, es un tratamiento que puede ser reforzada con, dietoterapia, fitoterapia, oligoterapia, helioterapia, talasoterapia, etc.
Todos tenemos puntos reflejos que con la sola presión de los dedos sobre ellos ya sea en orejas, manos, pies, etc., podemos a través del sistema nervioso aliviar dolencias y corregir el funcionamiento de algún órgano que no nos funciona bien.
A principios del pasado siglo XX, dos médicos se dieron cuenta de las reacciones que pasaban entre la superficie y el interior del cuerpo que ocurrían a través de reflejos órganos cutáneos y viceversa, producían dolor que se concentraba en unos puntos concretos.
Observaron que algunos de esos puntos dolorosos y otros síntomas, aparecían incluso antes de la crisis interna.
En la corteza cerebral quedan proyectados los diferentes órganos y estructuras anatómicas de nuestro cuerpo. Cada una de estas proyecciones sigue sus propias leyes. Así pues el aspecto de los órganos reflejados en los pies, no es igual que la de la oreja, el iris o las fosas nasales, ni tampoco son iguales las técnicas de manipulación utilizadas en cada una de ellas, aunque todas buscan normalizar los puntos reflejos sensibles.
Estos puntos reflejos dolorosos, aparecen si hay algún trastorno funcional u orgánico relacionado con la zona proyectada, son avisos externos de molestias internas.
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La reflejoterapia descubre estos puntos y los manipula adecuadamente para provocar la curación. La reflejoterapia, no trata nunca el órgano afectado, sino el reflejo de este en la parte del cuerpo correspondiente, mediante el masaje y la palpación.
El cuerpo echa sus residuos a las partes más separadas, dónde la circulación sanguínea es menos viva. Un ejemplo de esto son los dolores que causa la cristalización del c de la gota, que se sitúan a las extremidades, principalmente en el dedo gordo de los pies. Al mover las yemas de los dedos por las zonas reflejas de los pies, notamos unos bultitos, granulaciones, inflamaciones, etc. Si presionamos estas zonas, el dolor es agudo, esto nos permite conocer que algo no funciona bien en alguna parte de nuestro cuerpo, esto nos permite localizar algunos trastornos, pudiendo eliminar así la enfermedad
Es una técnica holística, es decir, trata a la persona en su totalidad y no por partes, cuidando tanto el aspecto físico como el mental y el emocional que conforman a la persona y que no pueden separarse
Hay una norma común a todos los tratamientos y que hemos de tener en cuenta:
“Estímulos suaves o débiles, actúan de forma sutil en el proceso de normalización, mientras que los estímulos muy fuerte o intensos actúan inhibiendo o paralizando la curación”.
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La Reflejoterapia como terapia complementaria
La reflejoterapia ayuda en el tratamiento de prácticamente todas las enfermedades, dolor de cabeza, lumbalgias, tumores, varices, artrosis, cálculos, etc., y su duración dependerá de diferentes factores: edad, si es una enfermedad crónica o no, de su estado evolutivo, del estado general de salud, del estilo de vida, etc.
Los pies son las partes más sensibles de nuestro cuerpo, especialmente en lo referente al dolor. Esto es así porque cerebral sensitiva que corresponde a ellos es muy amplia.
La importancia de pie como influyente en la salud del resto del cuerpo no es exclusiva de la reflejoterapia, ya nuestros antepasados descubrieron las bondades que tenían los baños de pies.
Los pies nos sirven para algo más que caminar, son una fuente de información que si la sabemos interpretar nos puede ser muy útil.
Muchas personas que se someten a este tratamiento de curación natural responden satisfactoriamente a la misma, en ciertos casos, servirá al menos para aliviar el dolor.
Libera el estrés y estabiliza inestabilidades del sistema nervioso, como insomnio o ansiedad.
Activa la circulación sanguínea y energética, al tratar el sistema nervioso a través de los puntos reflejos, actúa en las funciones linfáticas, mejorando las defensas de nuestro cuerpo.
Regula el sistema digestivo, mejorando el metabolismo y la eliminación de toxinas.
Alivia el dolor de una determinada zona, es ideal para aliviar la migraña, jaquecas o cefaleas, además de las patologías más comunes como las mencionadas anteriormente.
JOSEP MASDEU BRUFAL
Naturópata
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