Publicado: 19/02/2011 - Actualizado: 04/09/2018
Autor: Josep Masdeu
La astrología es la ciencia de los astros que enseña a calcular sus efectos, su influencia y su supuesta incidencia más o menos directa en los acontecimientos personales.
La influencia de los astros sobre la vida ha sido observada desde siempre y en todas las regiones del planeta. Lo que sabemos de ellos proviene de la simple constatación en los hechos cotidianos y llegó a estudiarse junto a la astronomía.
Nuestros antepasados ya se sintieron atraídos ante el espectáculo de la naturaleza celestial y no tardaron en crear mitos, historias y leyendas al respecto. Convirtieron al Sol y a la Luna en dioses, en objetos de culto y adoración, de respeto y de temor, con vida propia y que influían solo con su presencia en lo que le sucedía a los hombres, influían en el cambio de las estaciones (el día y la noche, la siembra y la cosecha), en los movimientos migratorios de los animales, etc. Usaron esos períodos celestes como método para pronosticar, por ejemplo, cuando debían cazar y recolectar. Apoyándose en estos conocimientos ampliaron los conocimientos a los movimientos de otros astros y cómo influían en otros aspectos de la vida.
Contenidos
La historia del Zodiaco
Se sabe que los Caldeos, alrededor del 3000 a.C., realizaron estudios y observaciones muy detalladas sobre los movimientos de los siete cuerpos celestes conocidos hasta ese entonces: el Sol, la Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno y los eclipses. Crearon una mitología para explicar el mundo buscando dar respuesta a las eternas preguntas de los hombres e inventaron dioses que vivían en el único lugar para ellos inaccesible: el cielo.
Fue hacia el 700 a.C. cuando nació la idea del Zodiaco. Haciendo la comparación, si los planetas son las agujas del reloj, el Zodiaco proporciona los doce números de la esfera, de treinta grados cada una; desde entonces conservaron los nombres de las mismas constelaciones.
Los chinos también observaron el comportamiento de los astros desde 2000 a.C. En la antigua India y en la civilización maya de América Central también se desarrollaron otras variedades.
En la antigua Grecia filósofos como Pitágoras y Platón incorporaron la astrología a sus estudios sobre religión y astronomía. Beroso, interesado en los trabajos de Hipócrates, es considerado el fundador de la medicina astrológica, práctica nociva que relaciona cada parte del cuerpo con un signo astrológico, y que afirmaba que las enfermedades eran provocadas por los planetas.
-
MAS EN BLOG DE NATUROPATíALa Siesta, un Complemento para la Salud
Lo que comenzó siendo una forma de medir el tiempo se convirtió en un sistema predictivo que se relacionaba con otros estudios como la alquimia, las piedras y plantas mágicas.
Hasta el siglo XVI, muchos sabios consideraron la astrología y la astronomía como ciencias complementarias.
Los descubrimientos realizados por Copérnico y Galileo influyeron en el pensamiento científico de la época. La importancia de la astrología fue puesta de relieve, entre otros, en las obras de Brahe.
En 1665 Colbert, fundador de la Academia de Ciencias de Francia, prohibió la enseñanza y práctica de este arte.
-
MAS EN BLOG DE NATUROPATíADigamos No al Estrés: Consejos para Reducirlo
Los Astros y los días
La representación divina dada por la Antigüedad a los cuerpos celestes era sagrada, por lo que su estudio y la influencia en el destino del hombre eran temas reservados para los sacerdotes.
Todos los pueblos y culturas sabían medir el cielo y entendían cómo compararlo con los ciclos de la naturaleza en la Tierra; nuestros días de la semana provienen de la astrología y son los mismos que utilizaban hace milenios las antiguas civilizaciones.
– El lunes es el día de la luna.
– El martes es el día de Marte.
– El miércoles es el día de Mercurio.
– El jueves es el día de Júpiter.
– El viernes es el día de Venus.
– El sábado es el día de Saturno.
– Y el domingo es el día del Sol.
La explicación del origen de la semana es que los siete planetas visibles a simple vista son 7. Si a ello le sumamos que la Luna cambia de fase cada 7 días, tenemos la respuesta.
No todos los calendarios de la Antigüedad funcionan igual; la astrología y cada cultura dio nombre a los días, a los meses y a los años, igual que dio nombre a las estrellas, a las constelaciones y a los signos del Zodiaco.
A raíz de la gran depresión de 1929, aparecen en Francia las primeras predicciones astrológicas. Aun sabiendo que estas afirmaciones son incompatibles con el dogma científico, la sociedad, abrumada por los acontecimientos, acepta los planteamientos ilógicos y supersticiosos. Desafiaban a los criterios de una sensatez lógica, que no siempre respondía a sus preocupaciones inmediatas.
Hoy, el esoterismo se encuentra en plena expansión: muchos consultan regularmente su horóscopo y los brujos y charlatanes proliferan por doquier.
La idea fundamental de la astrología era que todos los fenómenos del universo estaban unidos entre sí por una estrecha relación entre lo que pasaba en el mundo físico, el mundo animal y la voluntad humana.
Qué es el Zodíaco
El Zodíaco es un sistema astronómico de coordenadas, basado en la división en partes iguales de la banda que forman los planetas, el Sol y la Luna. Esta zona está dividida en doce partes imaginarias, una por cada mes del año y cada una contiene una constelación a la cual debe su nombre.
Zodíaco proviene del hecho de que la mayoría de las constelaciones que lo forman tienen nombres de animales.
Nuestro Zodiaco procede de la Antigua Grecia.
Las constelaciones zodiacales griegas son:
Aries: Carnero
Tauro: Toro
Géminis: Gemelos
Cáncer: Cangrejo
Leo: León
Virgo: Virgen
Libra Balanza / Pinzas
Escorpio: Escorpión
Sagitario: Arquero
Capricornio: Cuerno de cabra
Acuario: El portador de agua
Piscis: Peces
En tiempo de los romanos estas constelaciones tomaron los nombres del Latín y son los que nos han llegado hasta hoy.
Cómo se creó el Zodiaco
El Zodiaco se creó a través de un proceso:
-Se identificaron unas constelaciones por las que siempre pasaban el Sol o la Luna. En esta fase, los astrónomos mesopotámicos identificaron unas 18 constelaciones.
-Se redujo el número de constelaciones a doce para hacerlas coincidir con los doce meses lunares, proceso aparentemente realizado de forma gradual.
-Formalización del concepto de eclíptica e introducción de las doce constelaciones con el mismo tamaño (30º).
-Introducción del concepto de signo zodiacal como fracción de la eclíptica, autónomo de cada constelación. Este concepto es el que usaría la astrología, como disciplina separada de la astronomía.
Cada signo dura alrededor de 30 días, los cuales sumados formarán el año que todos conocemos. Los doce signos del Zodiaco están agrupados en los cuatro elementos: agua, aire, tierra y fuego.
Signos de fuego: Aries, leo, Sagitario. El fuego es el elemento más trabajador e impetuoso, poseen gran auto afirmación y empuje. Son agresivos, seguros, poderosos y exploradores, incansables y coléricos. Siempre aspirarán a ser los primeros en todo.
Signos de tierra: Tauro, Virgo, Capricornio. La tierra es el elemento asociado a las cosas materiales; por eso, los que pertenecen a este signo son ambiciosos, materialistas, concretos, cuidadosos, responsables, trabajadores y constantes.
Signos de aire: Géminis, Libra, Acuario. El aire es el elemento de la mente, por lo cual crea inteligencia; son personas pensativas, intelectuales, comunicativas. Les gusta relacionarse con todos; además, son cordiales.
Signos de agua: Cáncer, Escorpio, Piscis. El agua está conectada con las sensaciones, las emociones, la intuición y la inspiración. Las personas con signos de agua son gente de familia, fantasiosa, soñadora, imaginativa, depresiva, sentimental y romántica.
Los elementos de cada signo del Zodiaco
Cada elemento tiene características propias las cuales compartirá con los signos del mismo elemento.
Compatibilidades:
Aire y Fuego se complementan muy bien, ya que los dos son activos y les gusta moverse. El Aire es necesario para que el Fuego esté vivo. Cuando estos signos se relacionan son perfectos para compartir un mundo social, ya que Aire se especializa en eso, es el alma de las fiestas. Por su parte, Fuego le da a Aire inspiración y vitalidad que lo hace estar en constante actividad.
Agua Y Aire: el primero es sentimiento y el segundo es pensamiento. Sin embargo, estos dos elementos se atraen. Puede haber divergencias si Aire se empeña en que Agua diga cosas y viceversa, o cuando Agua quiera que Aire comunique sus sentimientos.
Aire Y Tierra brindan una relación complicada. Tierra se deja llevar por lo que ve y Aire por la razón; deben intentar llegar al punto donde se pueda tener una convivencia en la que ambos tengan su pensamiento muy abierto para las posibilidades que el otro le brinda de aprender, escuchar, ver y amar.
Aire Y Aire ofrecen una relación con ventajas; son ideales para comprenderse con la gente, su fuerza entre ellos va a depender de la comunicación.
Desde 2006, el astrólogo Henry Francis propone extender el Zodiaco de 12 signos a 13, circunscribiendo al nuevo oficio. Este entra dentro del signo solar de Sagitario y bajo su dominio nacen muchos médicos, humanistas, idealistas y personas animadas a comprometerse en busca de su realización personal.
Acerca del autor